Cuadritos, periodismo de historieta

noviembre 27, 2011

Geb: el color y la inocencia

Filed under: Cómic argentino,Entrevistas — Andrés Valenzuela @ 10:00 am
Tags: ,

"Soy un poco naïf o liviano para algunas cosas"

¿De dónde salió Gerardo Baró? Geb, como le dicen. ¿Participaba en algún fanzine? ¿Publicaba en algún sitio antes de lanzarse a su primer libro junto al guionista Luciano Saracino? La respuesta a estas últimas dos preguntas es «no», y la primera, se podría atender de tres modos: «de las clases de Oswal», «como ayudante de Poly Bernatene«, o «de la ilustración infantil». Con un libro en la calle (¡Hay que salvar a Tomate!), del cual el año próximo habrá una continuación, y fundó un sitio colectivo de ilustración que dio pie a varios webcomics (Vivo con mi madre). Lo hace, además, con un estilo inconfundible, fruto de un trazo particular y un modo de abordar el color.

¿De dónde salió, entonces, Baró? Según él mismo cuenta, la historieta le gustó «desde siempre», aunque cuando era chico no podía diferenciar el simple dibujo del cómic. «Caí con una Patoruzito en la escuela de Garaycochea. Creo que tenía 13 años y por entonces no había muchas opciones en los medios. Empecé a estudiar con Oswal y se me abrió un abanico enorme, empecé a conocer cosas que no sabía ni siquiera que existían. Fue un quiebre para mí. Y ahí me di cuenta que me gustaba la historieta. Me empezó a movilizar como medio».

Con el tiempo también se dedicó a la pintura. Fue por ese camino que llegó a ser asistente de Bernatene. «Me copaba mucho (Frank) Frazetta y ese tipo de climas, los ambientes de la pintura, el usar mucho color para lograr uno sólo, entonces él vio mi laburo y como estaba buscando asistente, me llamó», recuerda. «Después él me contó que vio que yo apuntaba para su mismo lado, aún sin llegar. Con él aprendí a laburar con Photoshop, que para mí era hacer color plano, y con él vi que se pueden hacer maravillas, ¡está bárbaro fusionar las dos cosas!».

Del paso de la pintura al ilustración le quedó la prioridad de generar sensaciones y climas. Y recurre a un método que otro colega, Juan Sáenz Valiente, había mencionado en una entrevista con Cuadritos: las llaves de color de las películas animadas. «Tenés toda la película en hojas y hojas, es una especie de escala cromática de cómo van a ir cambiando las tonalidades en toda la película», explica, «me quedó muy presente tratar de llevarlo a mi laburo» (more…)

febrero 25, 2011

Más crítica de historieta en Página/12

Filed under: Cómic argentino,Noticias — Andrés Valenzuela @ 4:00 pm
Tags: ,

Una sanísima costumbre: la sección mensual de crítica de historieta en Página/12. La nota central del mes está dedicada a ¡Hay que salvar a Tomate!, además, hay pequeñas reseñas dedicadas a Séptimo Círculo, Siege: Avengers, Bife angosto 2 y Persona.

En la columna de noticias se habla de los invitados a la segunda edición de Crack Bang Boom, el nuevo sitio sobre Carlos Meglia y la edición en papel de las reseñas del blog de Andrés Accorsi.

***

Un circo de esos que ya no hay

La historieta infantil acumuló un agradable puñado de pequeñas buenas noticias durante los últimos meses: la aparición de una editorial especializada, libros en los principales sellos, editores que anunciaron lanzamientos destinados a los más chicos para 2011. ¡Hay que salvar a Tomate! es una de esas buenas noticias. No sólo porque es una buena historieta, sino porque además significa el lanzamiento de una línea especializada (“Factor Fantasía”) para la editorial Pictus. También supuso el primer comic publicado en libro para el guionista Luciano Saracino (quien ya había publicado El Feo, en Fierro, y otras historias cortas) y para el dibujante Gerardo Baró. Está planteado, además, como el primer relato de una serie: “Las aventuras de Fede y Tomate”.

¡Hay que salvar a Tomate! transcurre en un circo de esos que ya casi no quedan, de los que incluyen leones. Aquí, el circo aparece como el espacio de la magia y la aventura, que comienza cuando una excursión solitaria del protagonista (Fede) para fotografiar al rey de la selva se topa con las ansias monetaristas del dueño del circo, un tipillo gordo y de galera, más mezquino que genuinamente malvado (…) (Seguir leyendo)

enero 25, 2011

Al circo con los chicos

Una nueva colección de historieta para chicos, en Editorial Pictus

A cada niño fascina algo distinto del circo. Los elefantes, los equilibristas, los trapecistas, el mago, el león, los malabaristas que escupen fuego. Es una edad donde la carpa de colores todavía conserva su magia, antes del desencanto propio de la adultez que revela los ámbitos circenses como espacios menos amigables y más sufridos que el imaginario infantil. Quizás por eso no puede haber medias tintas en un relato ambientado allí. No hay genuina narrativa circense para adolescentes. Es para adultos o es para niños, como en ¡Hay que salvar a Tomate!, la historieta de Luciano Saracino y Gerardo Baró (más conocido en el ambiente como Geb), editada recientemente por Pictus para inaugurar su colección Factor Fantasía.

¡Hay que salvar a Tomate! constituye, además, la primera entrega de una serie de libros («Las aventuras de Fede y Tomate») enfocados en un niño y su gato (Fede y Tomate, respectivamente). Se trata de historias con una narrativa pensada para chicos pequeños, de entre tres y seis años, que probablemente deban leer en compañía de sus padres.

Formalmente tiene recursos simples pero fuertes. Está narrado en primera persona, como modo de acercarse al lector, con cuadros grandes y coloreados en tonos suaves bien «amigables». La historia es un conjunto de peripecias, enredos y equívocos bastante divertidos que se suceden en un registro muy similar al de algunos dibujos animados clásicos y que evita tanto la violencia imperante en la televisión como el estupidismo que parece ser plaga en los programas destinados al segmento más chico de la audiencia). Cuando Fede descubre que el circo llegó a su barrio, se escabulle para ver de cerca al león. Una cosa lleva a la otra y el chico se encuentra a su gato en manos del dueño del espectáculo, para «servir» al león. Así las cosas, claro, al protagonista no le queda más que salvar a Tomate. (more…)

Crea un blog o un sitio web gratuitos con WordPress.com.